Con el tema de las pensiones hay que estar con los ojos bien abiertos para observar lo que está pasando en el resto de Europa, porque tarde o temprano también podría llegar a nuestro país. Hace poco veíamos cómo Dinamarca ha aumentado la edad de jubilación hasta los 70, y hoy fijamos nuestro foco en Alemania, el país donde las personas jubiladas deben compatibilizar el cobro de la pensión con los minijobs.
En la que desde hace décadas ha sido la locomotora europea, los boomers están viéndose obligados a aparcar su jubilación dado que durante su vida laboral no han podido ahorrar lo suficiente, mientras que las pensiones no dan para vivir con el alza del nivel de vida. Nada nuevo bajo el sol en un país donde hay unas 800.000 personas que deben tener un minijob para llegar a fin de mes.
Los niños alemanes tendrán cuentas en el banco para completar la pensión
La novedad es que parece que algo se está moviendo para evitar ese problema a las generaciones futuras, teniendo en cuenta que la situación de las pensiones no para de empeorar en toda la Unión Europea. Según informa la revista Fortune, se está estudiando la posibilidad de que los niños alemanes tengan cuentas en el banco para ir ahorrando dinero de cara al día en que se jubilen.
La apertura de esas cuentas forma parte de un plan conocido como 'pensión de inicio temprano' que está estudiando poner en marcha el gobierno de coalición alemán conformado por la CDU/CSU y el SPD. Tal y como ha informado la CNBC, este programa nace con la intención de ayudar a que los niños de entre 6 y 18 años tengan tengan una jubilación decente, ingresándoles todos lo meses una cantidad determinada de dinero.

Lo bueno de este programa es que mientras que en la edad laboral cada ciudadano destina una parte de su salario a cotizar para el momento de su jubilación, en el caso de los niños sería el propio gobierno alemán quien pagaría 10 euros al mes a los beneficiarios. Las autoridades alemanas estiman que cada niño podría ahorrar hasta 1.440 euros durante su periodo de escolarización, sin contar con los intereses producidos durante los 12 años que durará el programa.
Aunque la cantidad podría parecer baja, lo que se pretende es concienciar y poner la semilla para que los futuros jubilados puedan tener una base sobre la que seguir ahorrando cuando estén trabajando. Así, tras cumplir los 18 años, los beneficiarios podrán depositar fondos personales libres de impuestos en su cuenta con el fin de seguir aumentando la cantidad ahorrada mientras trabajan. Para evitar que puedan gastarse ese dinero ahorrado, los titulares de las cuentas solo podrán acceder al efectivo cuando alcancen la edad de jubilación, fijado en estos momentos en 67 años.
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