Froilán vuelve a la carga: nuevo altercado nocturno y un historial que no cabe en palacio

El sobrino de Felipe VI pasará aquí el verano porque en Abu Dabi son meses de excesivo calor, según Matamoros

Froilán de Marichalar
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Carlos Pérez

Editor

Froilán ha vuelto a casa, y ha vuelto a liarla. El nieto más díscolo de Juan Carlos I ha protagonizado un nuevo altercado en una discoteca del madrileño barrio de Chamberí. ¿El motivo? Un encontronazo en el reservado por culpa de los gritos y los móviles de los allí presentes que, como buenos fans del caos, querían una exclusiva en directo. Según ha desvelado El Español, el joven Borbón perdió los papeles cuando varios asistentes comenzaron a grabarlo mientras le gritaban "¡Froilán, Froilán!".

Y es que si alguien pensaba que su exilio en Abu Dabi había calmado sus ansias de jaleo, se equivocaba. El muchacho volvió a la capital y no tardó en recuperar el trono de los titulares. Porque recordemos que este episodio es solo una perla más de su larguísimo rosario de polémicas. Una de las más sonadas fue la pelea con navajas en plena calle Goya en diciembre de 2022, cuando su grupito se vio envuelto en una tangana de película. Un amigo suyo acabó con un tajo de casi 3 centímetros en el brazo.

Y hay más: meses antes, en marzo de ese mismo año, Froilán fue expulsado de una discoteca madrileña por disparar una pistola de gas blanco (sí, como lo lees) en pleno fiestón. El momentazo fue grabado y difundido en redes, porque en este país el "si no lo grabo, no existe" es religión.

Froilán rocía con gas a toda la discoteca Froilán rocía con gas a toda la discoteca

Otro escándalo tuvo lugar en su 24 cumpleaños en Marbella, que terminó con un tiroteo en el club Opium. Cinco heridos y un susto monumental. Él salió ileso, eso sí, escondido tras un sofá de la zona VIP. 

Y si nos vamos más atrás, su expediente académico y sus meteduras de pata en actos públicos dan para spin-off: desde malas notas hasta micrófonos abiertos que recogieron palabras poco propias de un royal. Vamos, que Froilán no decepciona. No sabemos si acabará siendo DJ en Ibiza o asesor de su abuelo en Abu Dabi, pero aburrir, no aburre.

Froilán es una mezcla de crónica social, reality salvaje y sketch involuntario, todo en uno. Un heredero del caos que, sin corona, reina cada fin de semana en los afters. ¿La Zarzuela? Calla. ¿La prensa? Dispara titulares. ¿Nosotros? Encantados, mientras no nos apunte con otra pistola de gas.

Fotos | Telecinco / Gtres

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